Salvador Muñoz
Un breve paréntesis…
(No me consta, pero dicen que la candidatura a la alcaldía de Martínez de la Torre le costó a Pedro Manterota Sáinz una patada en salva sea la parte.
Trabajaba en Gobernación, si no mal recuerdo, cuando en un desfile entró un contingente a echar pestes contra el gobernador Chirinos. Mandaron a Pedro a calmar los ánimos de los acelerados y los conminó a dialogar, pero la efervescencia estaba en su apogeo. Dicen que primero aguantó un escupitajo en plena cara y se contuvo. Se mantuvo ecuánime pidiendo calma. Al ver su actitud, el alebrestado preparó su golpe mortal y mandó su pie en medio de las piernas de Pedro, quien se dobló pero no se rajó. La acción fue vista por los altos mandos. Al poco tiempo le anunciaban que iba a ser el candidato a la alcaldía.
Hoy, Pedrito es dado de alta después de estar hospitalizado durante tres semanas en el Hospital. Empezó con dengue, al parecer hemorrágico, que se complicó con una falla hepática que en primera instancia lo mandó al CEM y de inmediato, al DF.
En breve estará dando lata en sus funciones como delegado de la SEV en la región de Martínez de la Torre.
Las muestras de cariño y solidaridad para este gran columnista, analista, restaurantero, empresario radiofónico, político y sobre todo, amigo, no se hicieron y se han hecho esperar.
Nos da gusto saberlo al cien por ciento… bueno, al 90, pero en vías de 100. ¡Vamos Pedro! Si no, ¿a quién haré blanco de mis bromas y quién me mandará a la chin…a?)
Cuento 1:
¿Qué misterio tienen las hijas, Fidel, para que el Lobo se vuelva Cordero; el amor lo conviertan en celo y en sus labios aparezca la palabra exacta aún en el silencio, para decirnos: Te quiero?
Para Fidel Herrera al igual que para cualquier padre, la hija sufre una transformación: La niña se convierte en princesa y queda encantada para siempre. Llega a adolescente, es joven, se casa, crece, pero para el padre sigue siendo “mi Princesa”.
Es el encanto del tiempo que impide trastocar la palabra en otra que carezca de amor, recuerdos, pequeños pasos, llantos, cumpleaños, vestidos, jeans, el enamoramiento, el corazón roto, la madurez y verla partir.
Hoy, a unos días de llegar al altar, no será la Señora, menos la esposa o doña. Para Fidel, simplemente será su Princesa.
Algo tienen las hijas que hacen que uno, padre, rompa con el dogma del Cratilo. En este caso, para Fidel, en las letras de rosa deja de estar la rosa, para aparecer sólo su hija. No hay más flores, no hay ramos, no hay más poemas, no hay más canciones en la palabra rosa. Sólo Rosa.
Hay un nuevo significado: el amor de su vida, el compromiso de no errar ante sus ojos, de no fallar ante su mirada, de no mentirle a sus oídos.
¿Y con qué sueñan las princesas?
No lo sabemos… los sueños de las princesas son misterios propios de su realeza. Quien ose intentar entrar en ellos, comete sacrilegio.
Nunca, por más amor que tenga un padre a su princesa, debe hurgar en su diario, en sus cartas, en su correo.
Si hay que hurgar, habrá que buscar en sus ojos, en ellos está todo lo que un padre debe saber: ¿Me quieres? ¡Te quiero!
¿Hay algo más que quiera saber Fidel? No.
¿Hay algo más que quiera saber el lector?
Sí. Qué quiere de regalo la Princesa.
Contrario a lo que se piensa, en las tiendas que son parte de nuestra vida, encontramos en la mesa de regalos una joven sin ostentosidad. Parecen regalos simples, pero tienen una calidad (de cálido) enorme.
Hablan de un matrimonio que sueña con un hogar acogedor, tierno… a lo mejor la palabra exacta sería: ¡familiar!
Para quienes tengan curiosidad, pueden checar en la siguiente página algunos regalitos y verán que no es mentira lo que digo: http://www.liverpool.com.mx/shopping/store/eventDetail.jsp?_requestid=239309.
Y si no tienen tiempo, les van unos datos: En el departamento de cristal y vidrio, lo más caro que piden es una mesa de centro de 949 pesos.
En electrónicos: Dos televisores LCD de 46 y 52 pulgadas, de 41 mil pesos y 55 mil 899 pesos.
En el departamento de cocina, el precio más elevado es el de una olla de presión de 3 mil 425 pesos.
Por eso es la Princesa de Fidel, por tanta nobleza y sencillez que hasta en sus regalos se refleja su corazón.
Cuento 2: Lector… ¿cómo haría para sobrevivir con 420 pesos semanales? ¿Sería imposible? Y si a eso le agregamos que en su trabajo no contara con ninguna prestación. Aún más: Por un accidente de trabajo debiera ser intervenido pero la operación le costaría ocho mil pesos ¿se le hace aún más imposible una existencia así?
Bueno, pues Josefina Bonilla Landero, la mujer que escogía los huacales más grandes para mi perro, vivía así.
Digo vivía porque ya no tiene trabajo, sólo tiene algo que la mayoría de los veracruzanos sub empleados por acaparadores o evasores de las leyes tienen: esperanza de justicia.
La historia de Josefina es la historia de muchos que a veces no acuden al médico porque carecen de Seguro Social o de dinero para pagar la atención de un doctor.
Sólo así se entiende que en las farmacias del doctor Simi se vean siempre con uno o más pacientes en la espera de que un galeno, por 20 pesos, les dé algo para mitigar su dolor…
Mientras, personas como Yolanda Limón Zamora, la Zar del Pollo en Xalapa, sigue ubicando en esquinas y esquinas de esta ciudad capital, sus puestos de pollo, con personas que por 1 mil 680 mensuales la libran del pago de impuestos y hacen que sus bolsillos se llenen de dinero libre de polvo y paja.
La historia de Josefina ya está en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje del estado de Veracruz y cuenta más o menos lo siguiente:
El cinco de mayo de 1995, fue contratada por Yolanda Limón Zamora para la venta de pollo crudo señalándole su ubicación de trabajo las calles 21 de Agosto y avenida Miguel Alemán.
Sus herramientas de trabajo: Un cuchillo, una tabla, una sombrilla, mesa para poder vender el pollo mientras laboraba de siete de la mañana a 15:30 horas de lunes a sábado.
El tiempo pasó y nunca hubo prestación alguna. Para más, aparecieron los males varicosos que se volvieron problemas.
Un ocho de octubre, del 2006, mientras acomodaba la sombrilla tipo playera, la base cayó en su pie izquierdo causándole una herida. Al tiempo, su herida se transformó en úlcera varicosa sin que Yolanda Limón hiciera algo por la atención médica de su empleada.
La consecuencia fue que tuvo que ser intervenida por una safenectomía y Yolanda Limón simplemente se desentendió de Josefina.
Hoy, sin dinero, con deudas y problemas de salud, Josefina pide algo nada más a los encargados del citado Tribunal: Justicia laboral.
PD1 Por cierto, en la Sala de Juntas de la Secretaría de Trabajo, Previsión Social y Productividad (STP) se firmó el nuevo convenio de contrato Colectivo de Trabajo con el que se da fin al emplazamiento a huelga entre el sindicato y las autoridades del Tecnológico de Acayucan.
El titular de la dependencia, Américo Zúñiga Martínez felicitó al secretario general del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Instituto Tecnológico de Acayucan (SUTITSA), Rasomel Izquiero Cruz y al director del Tecnológico, Juvencio Gerardo de León Olarte por haber privilegiado el diálogo para alcanzar soluciones satisfactorias para los trabajadores, sin afectar las finanzas del instituto.
e-mail: dor00@hotmail.com
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