Más IVA o…

Salvador Muñoz
Los Políticos

A un día de que se conozca la propuesta de Miscelánea Fiscal, la iniciativa privada contrataca: generalizar la tasa del IVA en quince por ciento, incluso en medicinas y alimentos.
¡Ah! Y para que la población de menores ingresos no la sienta tan dura, aplicar medidas a través de programas como “Oportunidades”… ¿no suena a paternalismo a la tercera potencia?
Para el Centro de Estudios Económicos del sector privado “la reforma a las finanzas públicas es inevitable, inaplazable y debe ser integral”, y advirtió que postergarla “significaría sostener un crecimiento mediocre, arriesgarse a elevar el desempleo, procurar la informalidad y el crimen, facilitar la desigualdad y aumentar la pobreza”.
¿No tenemos ya todo eso?
Por eso quieren generalizar el IVA en una tasa de 15 por ciento a todos los bienes y servicios, incluyendo zonas fronterizas, exentos y tasa cero, es decir, también a medicinas y alimentos.
Con ello, se incrementaría la recaudación, abogan entre los puntos a favor.
Entonces, ¿la falla está en la “recaudación”.
Al menos uno como empleado sabe que cada quincena o mes el patrón nos quita de nuestro salario el ISR además de cuotas al IMSS, Infonavit y sindicales, y la que se me pase.
¿Sabe cuánto paga de impuestos su sindicato? ¡Nada!
¿Pero qué me dice de los evasores fiscales?
De acuerdo a la plática de un amigo, del que me reservo su nombre, el asunto no está en promover nuevos impuestos porque el impacto inmediato repercutiría en la economía familiar, en alguna parte empresarial y hasta social.
Por eso, sugiere, que antes de afectar alimentos y medicinas con IVA, debería actuarse contra la evasión fiscal y regular mejor algunos insumos y consumos, por ejemplo: Hay empleados de Pemex (Y eso que está “quebrado”…) y CFE que no pagan esos servicios o tienen subsidios para artículos derivados, poniendo en desventaja al resto de la población en regiones donde hay plantas productivas de petróleo y energía eléctrica.
Igual hay personas físicas y morales, que “evaden” impuestos de muchas formas y provocan una baja captación fiscal y con ello merman las finanzas públicas. Ejemplos, usted los puede conocer o lo peor: ser uno de ellos: hay empresarios que sus vehículos personales los cargan a sus empresas y con eso deducen; algunos más, a través de trampas o “mordidas”, evaden e incumplen con sus pagos como contribuyentes. Incluso, hay fuertes empresarios y pudientes que no pagan el servicio de agua.
Otros ejemplos son algunos restaurantes que su régimen fiscal es “Pequeño Contribuyente” y por lo mismo, no expiden comprobantes fiscales pero a ojo de buen cubero, gozan de excelentes entradas económicas por ser punto de reunión de prominentes políticos…
Apostar la elevación de la recaudación a través del aumento de precios (lo que ocurriría si le meten IVA a alimentos y medicinas, entre otros) sin lugar a dudas sería un error de cálculo político y social que, como ya lo han anunciado algunos agoreros, podría desembocar en disturbios sociales…
Lo peor del caso es que el gobierno federal también apostara a esto último para ejercer un control total con el ejército… para evitar disturbios.
Recuerde que hubo recortes a los rubros de Salud y Educación pero se incrementó a Seguridad…
Ya como pilón…
Suena el teléfono:
¡Riiinnnnnngggg! ¡Riiinnnnnngggg!
–¿Buenoooooooo?
–¡Contador! Venga acá… ¡es urgente!
–¿Qué sucede?
–¡Tengo a los auditores en la puerta!
–¿Federales?
–¡Estatales!
–Entonces no te preocupes…
Para concluir… ¿Más IVA o reestructurar las leyes de recaudación? ¿Más IVA o ser más estrictos con el evasor?

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