Vuelo 576

Salvador Muñoz
Los Políticos

Vuelo 576.
Un pastor boliviano secuestra un avión con el arma más poderosa que ha matado más gente durante casi 20 siglos: Una biblia… En el nombre de Dios…
El motivo: Una revelación divina, combinada con la fecha 09-09-09 invertida, le decía que tenía que advertir al presidente Calderón de una catástrofe…
Por supuesto… la revelación divina llegó con tres años de retraso. Lleva ya tres años gobernando.
Hoy se habla de lo débil que es nuestra seguridad… esta ocasión fue un pastor alcohólico y drogadicto, según las primeras versiones periodísticias… ¿qué tal si en la próxima no es este boliviano?
Cheque esto:

Vuelo 576.
Rey, el secretario de Gobierno, secuestra con una botella de Chivas el avión. El motivo: Una revelación divina le dice que puede ser Procurador General de la República pero quiere ser gobernador… ¡está a punto de perder la cabeza!
Es detenido y ni Procurador General de la República ni candidato a Gobernador…

Vuelo 576.
Jorge Carvallo, con boina del Che Guevara y el libro de “Meif Kampf” ha tomado el avión. Asegura que tiene un arma biológica y tienen que bajarlo de inmediato en el aeropuerto más cercano o pagarán las consecuencias. Las autoridades cumplen sus peticiones y el priista sale corriendo al baño con diarrea ideológica…

Vuelo 576.
Celestino, el diputado perredista plurinominal, toma el avión, toma whisky y toma a una adolescente. A pesar del inmenso operativo de las autoridades del aeropuerto, soldados, federales y marines, no puede ser detenido… ¡tiene fuero!

Vuelo 576.
Nohemí Guzmán Lagunes secuestra el avión. Sus peticiones son claras: Si sus hijos no tienen chamaba en Veracruz, hará explotar el Boeing 737 en el Estado de México. Llega Peña Nieto y les da chamba. Nohemí abandona el avión.

Vuelo 576.
Víctor Arredondo Alvarez tiene bajo su control el avión. En él viajaban funcionarios del IFE a los que tiene sujetos con bombas. Si no anulan las elecciones en Cuajimalpa ¡los hará volar! Las autoridades acceden y su hermano Juan Adrián Arredondo tiene un brillo raro en sus ojos…

Vuelo 576.
Miguel Angel Yunes Linares se apodera del Boeing 737. Enfurecido, pide hablar con las autoridades porteñas. Su demanda: Enviar a cualquier punto del estado o el país, a Xico, el can de Cristina Pineda Covalín… ¡No soporta otro perro en la zona conurbada!

Vuelo 576.
El Peje no secuestró el avión… secuestró todo el aeropuerto y ni salen ni entran más vuelos. Es un caos total… demanda hablar con el espurio… demanda que destituyan a Carstens… demanda que el Congreso no pele la propuesta económica del espurio… demanda que el pinche Juanito cumpla su palabra… ¡es más! Demanda que le den la silla presidencial para él… aunque sea tres años… Se abrió otro aeropuerto… El Peje sigue en el otro esperando respuesta.

Afortunadamente nada más fue un boliviano el que tomó el avión… Felipe Calderón, dicen, se puso a temblar cuando se enteró que parecían centroamericanos y pensó lo peor… “¿Serán hondureños? ¿y el partido?”, dicen que pensó. El asunto estriba en cómo va a repercutir este hecho, tras quedar exhibida lo endeble que puede ser la seguridad aérea, a partir de mañana. A ver… ¿cómo?

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