jueves, 19 de noviembre de 2009

Ojo de gato: Paremos la reforma!!!

Guillermo Manzano

La reforma al Artículo 4º de la Constitución Local todavía tiene un camino que recorrer. Tiene que ser aprobada en, por lo menos, 107 cabildos (no hay que olvidar que en nuestra entidad tenemos 212 municipios). Después, volver a presentarse al pleno de la legislatura para su ratificación y/o, en el mejor de los casos, desecharla. En este contexto se puede decir que hay tiempo para detener la reforma que vulnera los derechos de las mujeres. Veamos:
Si las declaraciones, protestas de organizaciones no gubernamentales y posiciones de funcionarios y diputados en contra de la reforma son sinceras, entonces se puede articular una movilización de información por la mayoría del territorio del estado. Realizar foros, que incluyan a los promotores y organizaciones pro-reforma, entre más discutamos con ellos y presentemos argumentos, la población tendrá los elementos de juicio suficientes para discernir sobre lo que quiere y le conviene o lo que no quiere.
Hay tiempo para repartir en todos los municipios cientos de miles de trípticos y volantes con información sobre el tema. Colocar miles de pendones en todos los postes del estado y organizar brigadas (previamente preparadas con suficiente y basta información) para hacer mítines relámpagos en las plazas públicas veracruzanas. Considero que hay muchos voluntarios para sumarnos al trabajo. ¿Qué necesitamos? Fundamentalmente los recursos materiales: vehículos y la propaganda a distribuir y colocar. ¿Las comidas?, nada que no pueda calmar una lata de atún y unas galletas. ¿Dónde pernoctar?, nada que no se resuelva en la marcha. Entonces el quid es: ¿Dónde carajos sacamos los recursos financieros y materiales para informar y movilizar a la población en contra de la reforma? Pues de los aguinaldos de los diputados y funcionarios que se solidarizaron en las protestas en palacio legislativo.
Según la votación fueron 6 diputados que votaron en contra. Se infiere que es un voto de conciencia, de convicción. Por eso en un acto de congruencia pueden aportar para la movilización ‘contra la reforma’ 100 mil pesos cada uno, para sumar 600 mil pesos que pueden servir perfectamente para la impresión de los trípticos, volantes y pendones. No dudo que haya un impresor solidario en alguna parte de este estado que cobre los insumos y no la mano de obra, con lo que se abaratan los costos. Pero si hace falta, por ahí vimos y leímos declaraciones del consejero electoral Víctor Borges. Como sabemos, todos estos personajes recibirán algunos cientos de miles de pesos en diciembre, ¿será mucho para ellos aportar la lana para que los voluntarios nos movamos y nos arriesguemos en los poblados a que nos rompan la madre los fachos?
Claro que si todo lo que dijeron en tribuna y ante la prensa era porque ya sabían que la votación estaba perdida y, sólo querían reflectores y simpatías; pues está bien. Podrán decir que ellos hicieron todo lo que estuvo al alcance, pero que la ‘derecha y la iglesia’ ganaron la votación.
Por supuesto que no sólo es lana, sino que paralelamente a las movilizaciones, los diputados concerten citas con ediles para explicar de viva voz los alcances negativos que tiene la reforma, que realicen foros, conferencias y mesas redondas en todos los municipios que se pueda. Además de una constante y efectiva actividad en medios de comunicación nacionales e internacionales. Sabemos que el próximo año es electoral y, ¿les importa una elección o la vida y los derechos de las mujeres? Sólo les pido congruencia entre el decir y el hacer.
Por su parte, las organizaciones civiles, sobre todo esas que se manifestaron, pues que empiecen a salir de sus cubiles y empiecen a impartir ‘talleres exprés’ sobre sexualidad, mitos y realidades en parques y plazas públicas. Que dejen el confort del subsidio por el confort de la conciencia tranquila. Que realmente, al cabo de unos meses, puedan decir que ‘se hizo todo lo que se pudo’ y no se limiten a recortar las notas de prensa para entregarlas a sus patrocinares y justificar ‘que están en la lucha de los derechos de la mujer’.
Estas son sólo unas propuestas. No todo está consumado. Hay ayuntamientos perredistas, petistas, convergentes y, algunos priistas, que pueden no estar de acuerdo con la reforma. Hay sectores de las iglesias, que pueden no estar de acuerdo con la reforma. Vamos a ellos y dejemos de mirarnos el ombligo y justificarnos por ir un par de días a lucir playeritas nuevas con leyendas ad hoc. La sesión del 17 de noviembre fue el arranque, hay tiempo para detener la reforma de marras, ¿quién dice, yo le entro?

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