¡El arte del Papalote!

Salvador Muñoz
Los Políticos

Dice Pipo que para ganar el PAN la gubernatura de Veracruz este 2010, necesitaría un millón 300 mil votos.
Es decir, casi 400 mil más de los que hizo en la pasada contienda por la gubernatura con Gerry Buganza.
Desde un punto de vista frío, como este lunes, Pipo Vázquez Cuevas se equivoca porque pasa por alto un factor: Fidel.
Por supuesto que el actual gobernador sabe que estuvo a punto de perder la contienda electoral hace cinco años.
¿Qué hizo entonces, desde hace cinco años a la fecha Fidel Herrera Beltrán? Lo que no hizo el PAN en ese lapso: Trabajar.
Pueden decir que gastó toneladas de pintura roja, que usó en exceso el “fidelismo” y que los medios de información junto con la mayoría de sus colaboradores adoptaron el “fidolismo” como doctrina… sí, “fidolismo”, porque a la voz de Fidel Herrera, actuaban como fieles “fidos”… ¿criticable? ¡Sí amigos panistas, puede ser! ¡pero trabajó!
Puede que a muchos no les guste, en especial a los que no les dio hueso, pero es una forma de hacer política por parte del gobernador y válida cuando se quiere mantener el poder.
¡Vaya! Hay que reconocerle: Ha hecho obra, cierto ¡y la sabe cacarear! Ha hecho programas ¡y les saca provecho! Se sabe vender bien. No en balde más de 30 años trabajando para aprender todos los trucos de la política, de la grilla y del mercado.
En el PRI, creó una corriente, el “fidelismo”, que si bien no agrupa a todos, la logró colocar entre un grueso de la población que simpatiza con el partido y un poco más allá. La gente, la que vota, tiene algo que agradecerle a Fidel… si no toda, un alto porcentaje, altísimo…
Pero el PAN no pudo vender nunca nada al cliente, al pueblo, que en un momento dado simpatizó con él… tampoco pudo conformar una sola fuerza, sino que se dividió.
Los Bueno Torio, los Buganza, los Yunistas (de nuevo cuño al interior del PAN) y los Julencistas, quienes acaban de dar su apoyo a Gerry…
Y así, aún así, Pipo cree que puede ganar el PAN con un millón 300 mil votos en el 2010 lo que con 900 y pico no hizo en el 2004.
Fidel Herrera, para que lo entienda mejor, trabajó para no dejar la gubernatura en manos de la oposición.
Ahora que si trabajó para garantizar el triunfo de su delfín ¡ese es otro asunto!
Porque si bien Fidel Herrera tuvo grandes aciertos políticos a lo largo de su administración, sólo tiene un pequeño defecto: No permitió que ninguno de sus operadores creciera a menos que él quisiera. Sí, habilidoso maniobrista de la técnica del papalote: lo mismo dejaba ir el hilo, que lo jalaba, lo mismo dejaba caer el papalote que aceptaba que subiera, subiera y subiera… pero nomás le rehileteaba tantito ¡y a recortarle el hilo! o de plano, en una de ésas, ¡bajarlo!
Él fue, durante cinco años, amo y señor del Papalote.
Quienes jugaron con cometas, palomas, papalotes y pandorgas entienden de lo que hablo… ¿los nuevos políticos lo saben?
Ahora, el asunto será saber en las elecciones del 2010 qué tanto funcionó su doctrina fidelista en el grueso de la población, al nivel de que no sólo multiplique, sino triplique, quintuplique o un poquito más, los votos con los que él llegó al poder.
Porque esa debe ser la tirada del Gobernador: ¡Arrasar!
Y arrasar significa que haya una extensión de su doctrina, de su fidelismo otros seis años ¡o más!
Por eso, ahí está Javier Duarte de Ochoa, su Papalote de fuertes carrizos, de celofán rojo (más resistente que el papel), de cola protegida con navajas y por supuesto, un irrompible hilo cáñamo…
Así es estimado Pipo… en el 2010 el enemigo a vencer no es el PRI, rebasado por el mismo Gobernador (hasta el momento), sino su fidelismo interno.
Insisto: El pensamiento del Pipo es pobre, raquítico y deprimente si apuesta a ganar con un millón 300 mil votos.
Eso sí, tiene una ligera posibilidad…
En la seguridad del mismo gobernador está su debilidad: No acepta crítica de sus subalternos, nadie le contradice, no controla su enojo, evidencia su malestar si no aceptan su decir y si por una de ésas comete un error ¡se le puede ir el papalote! Si así fuera, ¿quién es capaz de elevar un cometa? Vaya, ese no es problema… porque en el PRI hay al menos dos Yunes que gustosos empinarían su propio papalote.

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