Yunes, ¿el candidato de Calderón?

Salvador García Soto
Serpientes y Escaleras

Por encima de la militancia panista de Veracruz y con las credenciales de ser “el candidato del Presidente”, Miguel Angel Yunes ya es el abanderado del PAN a la estratégica gubernatura veracruzana. Todavía no se olvida en el estado el estilo autoritario y de fuerza de Yunes como secretario de Gobernación de Patricio Chirinos, y aún está fresco el “pastelazo” con el que Calderón mostró públicamente —y al estilo priísta—, su predilección por el ex priísta. Yunes vuelve a Veracruz a librar una doble guerra: la suya personal con el gobernador Fidel Herrera, con quien mantiene una añeja y enconada enemistad, y la del presidente Calderón y el PAN que buscan desesperadamente evitar una debacle total para el partido gobernante en los comicios estatales del 4 de julio.
A Calderón y Yunes los une, además de los compromisos de origen con Elba Esther Gordillo, la antipatía personal hacia Fidel Herrera. Entre el gobernador y el Presidente nunca existió una buena relación y sus encuentros siempre fueron tirantes. El propio gobernador cuenta que en una ocasión, en una gira reciente, el presidente Calderón y él viajaban en una camioneta Suburban en el trayecto de una gira. Iban solos y Fidel aprovechó para externarle una opinión en relación a a guerra contra el narcotráfico. “Yo pienso señor Presidente que debiera replantearse la forma de combatirlos y apoyar primero a las policías municipales y estatales que están inermes ante la fuerza de los narcos”. La respuesta de Calderón al comentario fue un silencio absoluto con una mueca de molestia.
Así que Yunes tendrá todo el apoyo del centro para enfrentarse al nada fácil adversario que será Fidel, que en cuestión de días lanzará, con los protocolos partidistas, a Javier Duarte como candidato del PRI. La disputa en Veracruz será intensa, con mucho lodo de por medio, y si el gobernador tiene candidato, el Presidente también tiene el suyo.

El Universal