Cerca de confirmar el fracaso

Fernando Hernández Fernández
El Marcaje

Resta poco menos de una semana para que la Olimpiada Nacional concluya y Veracruz está cerca de tener su peor participación en la historia del certamen.
Hasta ahora no hay otra palabra para calificar la actuación de la Ola Roja más que fracaso y rotundo.
La delegación jarocha acumula, en el momento de redactar estas líneas, 17 oros, cifra que se ha estancado ya por muchos días y que ha dado oportunidad a que entidades como Baja California Sur, Michoacán, Chiapas, Coahuila, San Luis Potosí y Nayarit hayan rebasado ya en el medallero; todas ellas o menores en dimensión o en población que Veracruz.
Antes hubiera sido el primer portador de la antorcha para buscar la crucifixión del director del IVD en turno, en este caso Roberto Bueno Campos, pero me ha tocado ver, y sin ser cebollazo, que el dirigente sí se la rifó al lado de su equipo de trabajo.
Al platicar con algunos metodólogos en Guadalajara me enteré que a nivel administrativo se dio hasta de más a las diferentes Asociaciones deportivas de la entidad, pero fueron titulares de estas, entrenadores y hasta los mismos atletas los principales culpables del fracaso que ya se escribe en tierras tapatías.
Hubo días de concentraciones anticipados, viajes al extranjero para preparaciones, topes importantes; Veracruz fue uno de los pocos equipos que viajó en avión a la sede de la Olimpiada Nacional para darle descanso a sus atletas, se tuvo un hotel exclusivo para la Ola Roja con alimentación; en fin, no he oído queja de nadie en cuanto a esto como en otros ciclos, los pocos que dijeron algo en la oscuridad fue porque no recibieron sus vacaciones, que disfrazaron de traslados fueras de México según para entrenamientos.
Pero la delegación simplemente se derrumbó, las promesas se las llevó el viento. Falta trabajo. No es posible que en natación se hayan conseguido cinco oros menos y que los tres sumados en este 2010 sean logrados por una sola atleta, Diana Luna.
Fracaso también compartido es de disciplinas como el canotaje que aportó gran cantidad de las 34 platas que ostenta la Ola Roja hasta el momento, situación similar al tae kwon do, que no cumplió con su cuota y que perdió 13 finales, pero dos de estos metales argentos se debió por la falta de pantalones de sus nuevos dirigentes que no mordieron la mano que los puso al frente de la Asociación de la disciplina en la entidad, Juan Manuel López.
Y de ahí pa’l real, se falló en baloncesto, otra vez en beisbol, la penosa actuación del futbol, de parte del grupo del voleibol de playa, de los clavados; en fin, grupos que parecían para dar más y se quedaron a la orilla para enfilar a la delegación a este fuerte revés en el fin del sexenio.
La esperanza está cimentada en que el atletismo consiga el grueso de metales dorados que se necesitan para ascender, ayudado por las luchas asociadas y el levantamiento de pesas. Si se cuaja se hablaría de 19 o 20 premios áureos más, para hacer más decorosa la participación, si no ya muchos dirigentes de agrupaciones deben pensar en emigrar o sus agremiados meditar si es lo que quieren.
Hasta la vista.

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