Las grabaciones de Fidel

Sergio Vaca Betancourt Bretón *

Los últimos días las grabaciones que contienen pláticas imputadas al Licenciado Fidel Herrera Beltrán con personajes de la política veracruzana han sido noticia principal en periódicos de circulación nacional; los diarios locales más leídos; las radiodifusoras más escuchadas en todo el País y los mejores noticieros de las cadenas televisivas, al grado de que provocaron un escándalo equiparable al del Gober “precioso” de Puebla.
Como este asunto presenta aspectos legales que los veracruzanos tienen interés en saber (ayer en Xalapa, después de que sin aviso previo se suspendiera la sesión “para evitar que los Diputados de oposición habláramos en la tribuna de ese tema”, varias personas me preguntaron qué iba a pasar, y hoy en Veracruz sucedió lo mismo), lo analizo.
1.- Es obvio que los teléfonos del Licenciado Fidel Herrera Beltrán fueron intervenidos ilegalmente, sin autorización judicial y cometiendo un delito federal. Pero también es delito lo que dijo (entrometerse en las elecciones) y hace (aplicar dinero público a las campañas de los candidatos del PRI).
2.- La voz atribuida a Fidel es de él. Aunque la niegue, es suya. Hemos platicado personalmente varias veces; debatí 2 ocasiones con él en televisión y lo he escuchado durante horas en el Congreso en sus comparecencias.
3.- La voz de Renato es del Dip. con licencia Renato Tronco Gómez. Su curul está muy cerca de la mía y durante los 29 o 30 meses que fue legislador conversamos muchas veces. Hoy anda en campaña para ser Alcalde de Las Choapas por el PRI.
4.- El fundamento de la denuncia de Fidel contra Miguel Ángel Yunes, César Nava y Enrique Cambranis son los artículos 16 párrafo 9° de la Constitución Federal y 177 del Código Penal Federal, relativos a que las comunicaciones privadas (llamadas telefónicas) sólo pueden intervenirse por un Juez de Distrito y que a quien las interviene sin mandato de un Juez se le castigará con cárcel de 6 a 12 años. Entonces, sin pretenderlo, el Gobernador admite que las conversaciones grabadas son suyas.
5.- Que en la denuncia Fidel se equivocara en un apellido de César Nava Vázquez (escribió González) no es motivo para que el Agente del Ministerio Público Federal la deseche. Pudo hacerse “contra quien resulte responsable” y debían tramitarla.
6.- Las grabaciones, por haberse obtenido sin autorización judicial, originalmente carecían de valor. Como Fidel en su denuncia dice que las lograron interviniendo ilícitamente sus teléfonos, las convalidó. Ahora deben admitirse como prueba y analizarse.
7.- Es imposible saber quién grabó las conversaciones de Fidel. Su denuncia no prosperará; funcionará en su contra porque las grabaciones analizadas por expertos con el equipo adecuado probarán que es su voz, las de Renato Tronco Gamboa, Salvador Sánchez Estrada y los demás involucrados; que no fueron editadas y que utilizan recursos públicos para sus campañas.
8.- ¿Se puede identificar la voz en una grabación? Sí, usando tecnología de punta, como el Sistema automático de identificación de voz (SAIVOX) por investigación remota, que ha servido en Estados Unidos y Europa para identificar terroristas que amenazan con estallar bombas y secuestradores que piden rescate.
9.- ¿Es posible saber si lo grabado está editado (que sea producto de empatar palabras tomadas de otras conversaciones)? Sí, a través de programas de edición de audio como Cool Edit, Sound Forge, etc.
10.- ¿Por qué denunció Fidel? Para intentar justificarse ante la opinión pública y por estar mal aconsejado por sus abogados.
11.- ¿Para qué sirvió la denuncia de Fidel? Para echarse “la soga al cuello” al aceptar que es su voz e implícitamente reconocer que manosea las campañas y las financia con dinero del pueblo.
12.- ¿Cómo quedó Gerardo Buganza? Totalmente desacreditado. Se comprobaron los insistentes rumores sobre que desde hace años hacía negocios con Fidel, que éste le daba recursos para ser candidato a Gobernador por el PAN y que la finalidad de ambos era impedir la participación de Miguel Ángel Yunes.

* Diputado local por Convergencia