Jorge Arturo Rodríguez
Tierra de Babel
Quizás ya el destino nos alcanzó y nos empeñamos en ignorarlo. Por todos lados las señales de alerta se encienden y como la canción “Este mundo ya giró…” pero derechito a la chingada. Sin embargo, seguimos viviendo como si nada, como si todos los desastres recientemente suscitados fueran naturales, cuando en realidad mucho de lo que sucede es porque nosotros mismos lo hemos provocado por nuestras acciones, nuestra soberbia, nuestra falta de conciencia. Como dice el refrán, cuando el río suena, agua lleva… Y en estos tiempos de cambio climático lleva muchísima agua. Ya pa’ no hablar de temblores y demás calamidades, naturales o no.
Las inundaciones han sido ocasionadas por algo, no llegaron por sí solas: sufre la Tierra el peor de los agentes patógenos: el hombre, escribiera Nikito Nipongo.
El gobernador electo Javier Duarte de Ochoa dijo que Veracruz tiene una política de protección civil efectiva, pero necesita fortalecerse y volverse integral para que las obras hidráulicas sean una prioridad y una coincidencia en los planes estatales y municipales de desarrollo. De acuerdo, y ojalá en verdad se mantenga el Programa ABC (Aguas, Bosques y Cuencas); se ponga mayor atención al dragado de los ríos; se construya más muros de contención; se trabaje en la reubicación los que viven en zonas de riesgo; se prevengan y reduzcan riesgos para tener asegurada la integridad y la salud de los veracruzanos.
Agregó Duarte de Ochoa: “A partir del 1 de diciembre también se debe iniciar con el desarrollo de proyectos de infraestructura hidráulica para reducir los riesgos de la población a la recurrencia de las lluvias, pero las obras de prevención serán indispensables, sobre todo las acciones de reforestación porque nos permiten reducir los efectos negativos de las lluvias como los deslaves y los azolves de ríos”. Ora, esperemos así sea.
Porque no deseamos decir, con Nikito Nipongo, que "Llegará el fin del mundo cuando ya estemos aburridos de esperarlo”.
Los días y los temas
Ahora sí que el Tío Fide, desde el principio de su administración y hasta el día de hoy, la hecho de todo, pos ha sido bombero, agente de tránsito y hasta asume funciones de cada uno de los titulares de las dependencias de su Gabinete que casi siempre no se aparecen. Vaya, que ha sido gobernador, fiel a su principio: “Cercano a la gente”.
Como bien se lee en “Se sabe...”, de Milenio El portal: “Que en su intención de protagonismo puro, el Gobierno federal trató de desvirtuar el trabajo del gobernador Fidel Herrera Beltrán, quien desde que iniciaron las inundaciones en el sur del estado ha estado al pendiente de los apoyos, rescate y evacuación de toda la población. Pero no pudieron con su movilidad y su eficiencia en este rubro…”
De cinismos y anexas
Hablando de inundaciones, ¿sabían que el único que acepta el cambio con agrado, es un bebé mojado?
Y acuérdense, escribiera Goerge Carlín, que no siempre una cosa lleva a la otra. A veces una cosa lleva a la misma cosa, si no, pregúntenle a un adicto.
Hasta la próxima
jarl63@yahoo.com.mx
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