jueves, 9 de septiembre de 2010

Paquetazo Económico

Brenda Caballero
Números Rojos

¡Por fín! terminaron las especulaciones y la incertidumbre si tendremos que pagar más impuestos el próximo año. Y es que el pasado 8 de septiembre fue la fecha límite para que Ernesto Cordero entregara al Congreso de la Unión el esperado “Paquete Económico para el año 2011”.
El “paquetazo” está integrado por la Iniciativa de Ley de Ingresos y el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación. El primero se refiere a buscar de dónde saldrán los recursos y el segundo en qué se van a gastar.
¿Qué sigue ahora? dijera un amigo “lo que mejor les sale a los diputados… discusiones, pleitos por dinero y posiciones de montarse en su burro”. Y es que los diputados tienen hasta el 15 de noviembre para analizar el Presupuesto de Egresos y dar su visto bueno.
Aunque esto último se ve en chino, ya que los diputados priístas y perredistas han planteado disminuir la tasa el Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 16 al 15 por ciento y de 11 a 10 por ciento en la frontera.
Bueno, un 1% significa una gran diferencia para millones de mexicanos. Con unos cuantos pesitos ya nos alcanza para otro pasaje de autobús. ¿Será que los angelitos de los diputados están haciendo un milagro? ¿O será meramente un asunto político?
Si en verdad les preocupa la situación económica de la población ¿Por qué no proponen bajar un 2 ó 3 por ciento a la tasa del IVA?
No dude Usted que los diputados del PRI y PRD se saldrán con la suya y bajarán la tasa del IVA, pero el gusto nos durará poco, pues al pasar por la Cámara de Senadores, los panistas (que son mayoría: 49 de 128) regresarán las cosas a su lugar pues según su perspectiva para poder recuperarse de esa diferencia del 1% , el país tendría que recurrir a más impuestos, recortar el gasto o en el peor de los casos, a más préstamos (aparte del adquirido en esta semana de 1 mil millones de dólares pagaderos a 20 años).
Para nuestra tranquilidad, la iniciativa de Ley de Ingresos no contempla más impuestos ni aumentar la tasa de los que están vigentes y muestra aparentemente un panorama alentador al pronosticar un crecimiento del 4.5% en nuestra economía y un 3.8% en el Producto Interno Bruto (PIB).
¿Pero cómo vamos a crecer si no hay generación de empleos? ¿Ni nuevos impuestos?
La respuesta es simple, el Gobierno Federal incrementará su recaudación ¿Cómo? Poco a poco sin que nos demos cuenta.
Un ejemplo es a través de las instituciones bancarias: si Usted gana 6 mil pesos mensuales pero hace depósitos a sus créditos por cantidades mayores, el banco informará al Servicio de Administración Tributaria (SAT) con la finalidad de hacer un cruce y ver cuánto paga de Impuesto Sobre la Renta (ISR); si está pagando muy poco, le solicitarán aclare la procedencia del extra depositado, o en su caso tendrá que pagar más impuesto.
Y si no me cree, le comento: al cierre del año pasado, se tenía un registro de 26 millones 389 mil 618 contribuyentes. En 6 meses sumaron casi 4 millones y medio de contribuyentes.
En lo que va del sexenio de mi querido presidente, se han sumado poco más de 8 millones de mexicanos al padrón fiscalizador del SAT.
En lo que respecta a las empresas y personas físicas que tienen trabajadores a su cargo, acaba de firmarse un convenio entre el IMSS y el SAT para detectar omisión de impuestos por concepto de pago de nómina. Estas dos instituciones cruzarán los datos para verificar que las cuotas pagadas corresponden a los salarios reales pagados a los trabajadores.
Por si esto fuera poco, me platicaba con tristeza una contadora que el SAT hace varios meses empezó a captar pequeños contribuyentes (Repecos) de una vil manera. Ella expresaba su indignación porque en cierto tianguis, llegaron autoridades fiscales a dar de alta a las personas que estaban vendiendo diversas mercancías, no porque fuera malo incluirlas en el padrón, al contrario, ella apoya la recaudación justa, sino porque no se les informó de sus obligaciones ni se les capacitó para llevar sus registros de ingresos y gastos: “ahora todos ellos tienen problemas fiscales y tendrán que pagar impuestos, actualizaciones multas y recargos”.
Dentro de los puntos importantes, el Ejecutivo propone un déficit presupuestario de 42 mil millones de pesos, lo quiere decir que los gastos serán superados por los ingresos, ¿entonces, cómo será ese crecimiento económico? ¿con deudas?
Este déficit no contempla la inversión de Pemex con un precio del crudo de 63 dólares por barril y plataformas de producción y exportación por 2 mil 550 y 1 mil 149 miles de barriles diarios, cantidades que han ido en declive ya que según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), México enfrentará en 2017 una situación “grave” en las finanzas públicas, al dejar de ser un exportador de hidrocarburos. ¿Qué pasará para entonces? Seguramente se incrementará el IVA en 22% y el ISR en 16% para financiar 40 centavos de cada peso de gasto público que hoy se obtiene de la riqueza del subsuelo.
Con lo que respecta al Presupuesto de Egresos, el Ejecutivo seguirá con la política de ahorro y austeridad orientada a fortalecer la seguridad pública, promover el desarrollo social y consolidar el crecimiento económico, dando prioridad a los programas sociales (que tanto beneficio electoral le han dejado).
Cabe destacar que la finalidad de “mi querido presidente” es acabar a como dé lugar con la delincuencia organizada pues propone aumentos que van del 9 al 28 por ciento con respecto al proyecto de 2010 a las secretarías de Gobernación, Defensa Nacional, Marina y Seguridad Pública.
Contempla un incremento histórico del 6.8% en las participaciones y un 2.7% en las aportaciones a las entidades federativas con respecto a lo aprobado para 2010.
Mientras tanto, ahorre hasta que se apruebe el presupuesto, pues no cabe duda que para el próximo año tendremos que pagar más para beneficiarnos con menos…

brendacaballero1@hotmail.com

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