miércoles, 27 de octubre de 2010

Reformas Laborales

Brenda Caballero
Números Rojos

Cuando escuché la frase ''algo malo debe tener el trabajo, o los ricos ya lo habrían acaparado” sentí un dejo de ironía en ella, inmediatamente mi curiosidad femenina quiso conocer a su autor intelectual y recurriendo al poderoso Internet encontré que era de don Mario Moreno Cantinflas. ¿De la persona o del personaje?
Vaya que hay un sinnúmero de frases sobre el trabajo, algunas tan ciertas como: “Cuando el hombre ya no encuentra placer en su trabajo y trabaja sólo por alcanzar sus placeres lo antes posible, entonces sólo será casualidad que no se convierta en delincuente”; o esta hermosamente natural de George Herbert: “Dios provee a cada pájaro con un alimento, pero no se lo echa al nido”.
Vaya, hasta identifiqué a mi marido con la cita de André Maurois: “Un hombre digno de ser llamado tal, ama a su trabajo sobre todas las cosas del mundo, incluso más que a la mujer que ama” (si en verdad alguien merece mi respeto a su manera de trabajar es él). Créame que la mayoría de las mujeres nos quejamos cuando el marido trabaja mucho porque no está a nuestro lado (aunque claro, hay sus excepciones).
Al principio he de reconocer me costó demasiado; hoy, he encontrado la solución (y no es un amante): “trabajo igual que él” y si me sobra tiempo, al igual que don Magno Garcimarrero, me pongo a escribir hasta la madrugada.
Pero el trabajo lo empleamos diariamente aunque se esté desempleado, sólo basta que amanezca para decir: “Cuánto ‘trabajo’ me cuesta levantarme” o leer las notas en los periódicos: “El Gobierno federal ha creado miles de empleos” y si usted conoce a alguien que acaba de salir de la facultad le dirá: “no encuentro trabajo”, “me van a pagar muy poco por el trabajo que voy a realizar”…
Y ciertamente tiene razón, mientras que en Estados Unidos el salario mínimo es de aproximadamente ocho dólares la hora (104 pesos), en México el Salario Miserable (dijera la vox populi por sus siglas SM) es de 54 pesos (pero diarios por ocho horas).
Esto quiere decir que para que un trabajador en México gane 832 pesos (lo que gana un gringo diariamente) debe trabajar 15.4 días. ¿Será por eso que cada año aumenta el número de migrantes?
Entonces… por favor, no es necesaria una reforma laboral… ¡es urgente!
Habría que empezar por modificar la parte del artículo 123 que sólo toma en cuenta la inflación para fijar los salarios mínimos; habría que considerar también al Índice de Precios al Consumidor y la productividad, pues todo sube y no se tiene el mismo poder adquisitivo.
Apenas hace unos días las fracciones parlamentarias del PRI y el PAN plantearon sus propuestas ante la Cámara de Diputados, sin llegar hasta el momento a un acuerdo (como siempre).
La propuesta del PRI, aparte de realizar cambios en más de 100 artículos de los 1,010 de la Ley Federal del Trabajo, pretende eliminar toda posibilidad en la introducción de nuevas formas de contratación; fortalecer la productividad, modificar la impartición de justicia, desaparecer figuras como el término de las relaciones laborales atribuidas a la “causa de fuerza mayor”, reducir de 48 a 40 las horas la jornada laboral, así como eliminar la toma de nota para el registro de sindicatos, manteniendo sin restricciones los derechos de huelga y la contratación colectiva de trabajo.
El PAN a su vez propone facilitar el acceso y permanencia de las trabajadoras al mercado laboral, fomentando la equidad de género, la no discriminación en las relaciones laborales y la protección de sus derechos. De tal forma que prohíbe al patrón exigir a las trabajadoras certificados médicos de ingravidez para el ingreso, permanencia o ascenso en el empleo, así como despedirlas por estar embarazadas, cambio de estado civil o tener a su cuidado hijos menores (en caso contrario prevé una sanción pecuniaria).
Menciona también que en el caso del hostigamiento sexual, el trabajador (a) afectado (a) tendrá derecho a rescindir justificadamente la relación de trabajo y a que se le pague la indemnización respectiva, independiente de que se establezca una sanción económica al patrón de 250 hasta cinco mil veces el salario mínimo. Caso contrario si el trabajador llegara a cometer acoso sexual, podrá ser despedido sin responsabilidad para el patrón.
Los trabajadores domésticos también se contemplaron, pues podrán disfrutar de un descanso mínimo diario nocturno de nueve horas consecutivas, así como un descanso mínimo de tres horas entre las actividades matutinas y vespertinas.
Todo lo anterior suena maravilloso, sólo falta la aprobación de los señores diputados y senadores, personajes que no tienen prisa pues ganan más de 190 mil pesos mensuales más prebendas.
Ni modo, tendremos que seguir esperando… como siempre.

brendacaballero1@hotmail.com

No hay comentarios: