viernes, 7 de enero de 2011

Pajarazos y gasolinazo

Salvador Muñoz
Los Políticos

Este sábado, que debiera ser un día para platicar de la familia, de salir a comer, de ir al cine, maldita cosa, lo tengo que ocupar por dos asuntos que me preocupan y que de seguro igual a usted, estimado lector, lo acongojan: los pájaros que se mueren y el famoso gasolinazo.

I
Una noticia que conmocionó al mundo, sin duda, es la muerte de miles de pájaros en distintos puntos de Estados Unidos y una provincia de Canadá. Aun cuando hay investigadores que realizan estudios minuciosos para saber el motivo de la muerte de las aves, a ciencia cierta aún se desconoce qué las llevó a su fin.
En Veracruz, de la conmoción se pasó al pánico. Algunos funcionarios ya temen salir de sus oficinas ante una psicosis colectiva que se ha impregnado en diversas áreas del gobierno estatal.
Así que si un día, caminando, encuentra corriendo despavoridos a un Chilli Willy, un Pijul, un Golondrino y a un pájaro puñalín, mejor compre viagra, ¡no sea que a usted también se le caiga el pájaro!

II
Un día, estoy seguro, compraré una bicicleta.
Quizás no tanto para hacer ejercicio sino porque sencillamente a como van las cosas, difícilmente, me alcance para la gasolina de mi moto.
Es más, estoy seguro que en un futuro no muy lejano, el padre de familia, en torno a la mesa, con su esposa y los niños, habrán de echar a la suerte, quién no comerá ese día para entonces poder cooperar con el extra para el tanque, porque lo que antes se le ponía, ya no es suficiente.
Es más, ante la poca demanda en las bombas de gente que quiera abastecer sus tanques, es probable que los zares de la gasolina en Veracruz tengan que hacer promociones, como algo así: “por cada 30 litros de gasolina que meta a su tanque, le llenamos sus llantas de aire”... o algo como: “Si llena el tanque, llévese gratis un litro más”.
Y es que la situación no está para menos... de verdad.
Eso me recuerda el caso de un gasolinero que, viendo difícil la situación, puso un letrero en su negocio: “Sexo gratis por cada tanque lleno... ¡participe!”.
Así que, dicen, un día llegó a esa gasolinera un presidente de conocida república acompañado de cierto representante del pueblo que bien puede ser un gobernador, un diputado o hasta un presidente municipal.
Viendo el letrero, el presidente quiso comprobar la bondad de la promoción. Llenó el tanque y habló con el gasolinero: “¡Quiero participar en eso del sexo gratis!”
El gasolinero, atento, le dijo que para concursar tenía que adivinar el número de la suerte de ese día que estaba entre el uno y el 10.
El presidente entonces dijo: “¡7!”. No podía fallar, pues es cabalístico... ¡pero no! El gasolinero le dijo: “¡Lástima! ¡Por poquito! ¡Era el seis!”.
Desangelado, el presidente se retiró junto con el representante del pueblo pero como tenía la espinita clavada, al día siguiente le dijo a su acompañante: “¡Vámonos en tu camioneta a cargar gasolina!”
Llegaron, pidieron el tanque lleno y llamó al gasolinero para volver a participar en la promoción...
El gasolinero le repitió el procedimiento: Entre el uno y el 10 estaba el número de la suerte para poder tener sexo gratis.
El presidente dijo: “¡Tres!”. Y.... “¡lástima!”, nuevamente se había quedado cerquita: “Era el cuatro”.
El presidente arrancó el carro y le dijo al representante del pueblo: “Qué se me hace que voy a tener que echarle a Profeco a este pinche gasolinero transa... ¡hace trampa!”.
A lo que el representante del pueblo respondió:
–No, mi presidente... ai como lo ve, el gasolinero es derecho....
–¿A poco usted ya tuvo sexo gratis?
–No, pero mi mujer ha venido a cargar gasolina dos veces esta semana, ¡y ha ganado!
Moraleja: Créanme que el gasolinero nunca pierde; el presidente, nunca gana; y al pueblo, ¡siempre se lo cogen!

III
Ya para desearle un buen fin de semana, hay que ver las cosas con optimismo... si no le alcanza el dinero, en breve tendrá buenos motivos para que le pida a su jefe un aumento de sueldo:
—Jefe... vengo a pedirle aumento de sueldo...
—¿Y eso?
—Hay tres empresas tras de mí...
—No me diga: ¿Cuáles?
—¡La de luz, la del teléfono y la del cable!
Sí, señores, también viene incremento al servicio de electricidad.

email: dor00@hotmail.com
twitter: @cainito

2 comentarios:

Unknown dijo...

Chavita no pongas las que me salen feas, no manches, te pasas, aún así te mando un kiko.

Anónimo dijo...

Estuvo bueno lo del gasolinero y lo del aumento de sueldo, aunque suene gracioso es la realidad. Saludos