martes, 22 de marzo de 2011

¡Bara bara!

Salvador Muñoz
Los Políticos

Nuestros políticos gustan de ensalzar un término para justificar sus actuaciones: La familia.
Por supuesto, realmente nunca vemos beneficios en la nuestra pero en la de los políticos, vemos cómo se hacen de fortunas sus hermanos, cómo estudian sus hijos en el extranjero, cómo hacen sus cuñados constructoras, cómo crecen sus negocios familiares...
No somos únicos... Hoy, en Guatemala, se vive una polémica en la que hay voces a favor y otras en contra: El divorcio de la pareja presidencial.
No hubo infidelidad, diferencia de caracteres ni violencia intrafamiliar... el rompimiento se da “por mutuo acuerdo” para que una de las parejas se enfile a un objetivo: Buscar la presidencia de la República.
Vamos, en pocas palabras, si fuéramos más “grillos” que nuestros políticos, diríamos que tanto Alvaro Colom como Sandra Torres, su aún esposa, están dispuestos a sacrificar el núcleo principal y más sagrado en una sociedad “para servir” a la sociedad: la familia.
De acuerdo a las leyes del vecino país sureño, ningún familiar del presidente en turno está en condiciones de ser votado a algún cargo de elección popular... por eso la urgencia del divorcio.
Sí, había escuchado matrimonios por conveniencia y hasta noviazgos... ¿pero divorcios?
Desde mi punto de vista, el poder, es evidente, ya deformó a la familia Colom-Torres. Su sed por mantenerlo no tiene limitaciones... si hay que divorciarse para mantenerlo, ¡pus nos divorciamos!
Y usted puede decir: Bueno, pero qué chingaos nos importa... ¡que se jodan los guatemaltecos... que se joda Byron! Sencillamente el divorcio es bronca de los chapines... como dijera la banda: ¡Es tu perro, tú lo bañas!
Salvo un ligero detalle:
Al señor Alvaro Colom se le acaba de condecorar con la Medalla Veracruz y, de acuerdo a la Ley, se le otorga “por su conducta y acciones”, mismas que, de seguro, el Comité Estatal para el otorgamiento de tal, estudió a conciencia entre otros extranjeros postulados para recibirla...
¡Ah! Claro... si la Ley no me la han cambiado, se puede dar la medalla a extranjeros con el
objetivo de reconocer su obra, méritos, conducta o trayectoria en beneficio de la humanidad y por cualquier otro mérito que a juicio del Comité deba considerarse para este fin.
Permítame el lector entrecomillar las últimas líneas: “por cualquier otro mérito que a juicio del Comité deba considerarse para este fin”.
La razón del entrecomillado es porque, cuando le entregan a Alvaro Colom su Medalla Veracruz, al menos en el boletín de prensa 1329, de la Dirección General de Comunicación Social, no citan su obra, méritos, conducta o trayectoria en beneficio de la humanidad para que sea merecedor de ésta. Por lo tanto, en el entrecomillado cabe la razón que da el gobernador en la condecoración: “Visitante Distinguido”.
No... no me interesa si abaratan o no las Medallas Veracruz.
Digo, si al secretario de Desarrollo Social federal, Heriberto Félix Guerra, le dieron su Medalla Veracruz sin cumplir los requisitos de ser veracruzano o “de perdis” extranjero, cuantimás a un Presidente que el Comité Estatal para el Otorgamiento de tal condecoración, consideró un “Visitante Distinguido”.
Se me olvidaba... además de la medalla, los condecorados reciben un bonito diploma y, para hacerlo más jarocho aún, “otra cosita, ay arriba y arriba”: un estímulo económico y
en su caso, el apoyo adicional que acuerde el Comité. Para ello, el Gobernador, por conducto de la Secretaría de Finanzas y Planeación, dispone de una partida presupuestal para tal otorgamiento.
¿De cuánto fue ese apoyo?
Ni idea... ni me interesa...
Pero no comulgo con la idea de condecorar a un presidente de una república que es capaz de sacrificar a su familia en aras de mantener el poder a través de su futura “ex”... no le veo lo distinguido a ese sujeto para darle un reconocimiento... para mí, el gobernador vendió barata la Medalla Veracruz.

e-mail: dor00@hotmail.com
twitter: Los_Politicos

No hay comentarios: