Desempleo galopante

Enrique Yasser Pompeyo
Mesa de Redacción

La cifra, por menor que sea, invita a la reflexión. De acuerdo con el Servicio Nacional de Empleo (SNE), en nuestro estado hay aproximadamente 90 mil personas desempleadas, lo que representa el tres por ciento de la Población Económicamente Activa.
De esa cifra, 56 por ciento son jóvenes recién egresados del nivel superior o sin experiencia laboral, a quienes se les dificulta encontrar oportunidades de trabajo dignas.
Pero para el director del SNE, Sergio Rodríguez Cortés, es una cantidad considerable. Y así lo explica: “Pensando que cada año egresan de las universidades veracruzanas cerca de 35 mil estudiantes, el reto es muy fuerte; es decir, tendríamos que estar generando en Veracruz más de 35 mil nuevos empleos para tratar de satisfacer esa gran necesidad”. Visto de esa manera, los números ponen a temblar a todos.
Aunque claro, la demanda de oportunidades de empleo por parte de los jóvenes es global, no es un asunto solamente del estado o del país.
Lamentablemente, a pesar de que existen vacantes en diversos lugares, son mal pagadas y los empleadores no ofrecen las prestaciones de ley.
El asunto es complejo. Los medios para generar mejores oportunidades y condiciones laborales no es responsabilidad de un solo sector, un nivel de gobierno, ni de una secretaría, sino un trabajo conjunto desde la vinculación con la oferta laboral y educativa.
Para Sergio Rodríguez Cortés, las estrategias implementadas hasta el momento resultan insuficientes para dar respuesta a la demanda de empleo que existe a nivel nacional, sin embargo, el esfuerzo para lograrlo sigue en pie.
Y señala un punto clave: “Es una discusión que se tiene que dar, no con los titulares de las dependencias, ni mucho menos en los medios de comunicación, la discusión se debe dar en la Cámara de Diputados”.
El ejemplo no puede ser más claro. El año pasado tan sólo en materia de Seguridad Pública se invirtió casi 20 mil millones de pesos; en cambio, para el Fomento al Empleo se destinó mil 400 millones de pesos.
La cantidad es irrisoria, pues representa menos del 1 por ciento de lo que producen todos los mexicanos y mexicanas. La pelota está en el campo y resolverlo es un trabajo de equipo.

Sol azteca se apaga
El PRD en la entidad está muerto o, por lo menos, se encuentra debilitado por las pugnas entre las diferentes tribus que buscan controlarlo. Además, su trabajo con la sociedad es nulo.
Lo dicen los mismos perredistas. Tanto Uriel Flores Aguayo como Manuel Bernal Rivera han manifestado que se requiere de un verdadero liderazgo para sacar del hoyo al partido aurinegro, pero no existe tal.
Nuevamente, para las elecciones federales del próximo año, el sol azteca tendrá pocas oportunidades de ganar. Se quedará con las migajas que le dejen el PRI y el PAN.

enriquepompeyo@hotmail.com