Estabilidad: Dulce y Corintia

Salvador Muñoz
Los Políticos

Estabilidad es la palabra.
Rara vez se cuestiona en un político su estabilidad, tanto económica, política y emocional.
Pocos son los que se sostienen en la honrada medianía... ¡vaya! se les nota que el puesto (o el hueso) les ha sentado bien. Su “estabilidad económica” se desparrama.
Respecto a la estabilidad política, muchos se mueven cual velero, por donde sopla el viento. Si les conviene, hay acción, si no, tan apáticos al entorno y por supuesto, a los ciudadanos.
Pero rara vez pensamos en la estabilidad emocional... pocos, muy pocos pueden entender que un buen político o una buena política inicia desde la relación que guarda con su pareja...
II
Jorge pasa desapercibido en las colonias. Mantiene su distancia. Nadie lo pela. Bueno... casi nadie. Pregunto quién es y nadie habla. La discreción pareciera ser la consigna. Sólo sé que se llama Jorge.
Pero veo que sus ojos la siguen mientras ella escucha a esa mujer, al señor o hasta al chavo. Ve cómo una abuela le da la bendición, la mirada tierna del abuelo que la toma de las manos o el “gandallita” que aprovecha para tomarse la foto a su lado y robarle un beso en la mejilla.
Jorge, no obstante, se mantiene a distancia, paciente, respeta ese espacio a donde ella le gusta estar, involucrándose con la gente, platicando con la gente... trabajando por la gente.
Se da su tiempo para acompañarla, de estar con ella... aunque sea a distancia. ¡Es el novio!

III
Caso contrario. El domingo, por Los Tecajetes, por más que quisiera pasar desapercibido, la gente alrededor decía: “Mira, allí está su esposo”.
Mientras, la señora se acercaba al transeúnte y le platicaba de sus proyectos, de sus ideas y extendía un tríptico.
Como Jorge Uribe, Armando Méndez se mantiene a distancia pues le da el lugar que le corresponde en este caso a su esposa.
Si bien, tanto Jorge como Armando son respetuosos de la labor de sus parejas, hay algunas diferencias... la principal, es la edad... Jorge no araña siquiera los 27... Armando fácilmente le dobla la edad y quizás un poco más. Jorge apoyará al PRI... Armando al Movimiento Ciudadano. Jorge mantiene distancia y lo logra... Armando aunque quiera alejarse, no puede.

III
Hay que destacar algo en este par de parejas: Estabilidad.
Es una palabra sencilla pero difícil de aplicar en una relación sentimental más cuando hay política de por medio... Da gusto ver a Dulce y Armando compaginados ya sabrá Dios por cuántos años... también da gusto ver a Corintia y Jorge en una relación de jóvenes que ha optado por la discreción y alejado tanto de rumores como de escándalos. Por supuesto, identificar a Jorge Uribe es casi imposible, porque los reflectores fácilmente se los roba la novia, pero lo mejor es que él lo entiende y la entiende.
Estabilidad emocional propicia por lo regular un ambiente sano de trabajo, de camaradería y proyectos conjuntos.
El ejemplo es claro en Dulce y Corintia aunque el abismo generacional se abra en ellas.
Ambas son apoyadas por sus respectivas parejas en sus proyectos y por ende, la estabilidad emocional implica estabilidad política, de ésa que es ajena a escándalos, a chismes, dimes y diretes que pueden ser y son bien aprovechados por los adversarios políticos.
Sí, puede haber muchas diferencias entre Armando y Dulce con Corintia y Jorge, pero hay algo que reflejan ambas parejas: Apoyo y confianza, tanto en ellos como en los potenciales electores.