martes, 6 de noviembre de 2007

¡Qué vergüenza!

Fernando Hernández Fernández
El Marcaje


No sé ni por dónde empezar, porque los dos temas que quiero platicarles hoy son realmente de pena ajena y que cuando vi los hechos no lo pude creer. Creo que me iré por el orden temporal, así que primero lo primero.

Hace varias semanas publiqué una pesadilla que tuve, justamente acababa de entrar Roberto Bueno Campos como director en el Instituto Veracruzano del Deporte; ahí, narraba ciertos espacios de terror donde El Flamer tenía pachanga total en el edificio, que Joe de Lara era su asesor y que el deporte valía para dos cosas.

Bueno, déjame contarte lector que el sueño se hace, poco a poco, una realidad, y a pesar de que el Día de Muertos acabó el miedo sigue en mí. ¿Por qué? Mira, qué me dirías si te dijera que el jefe en el IVD candidateó a uno de sus subordinados para Rey Feo del próximo carnaval jarocho.

Es una locura, ¿o no? Pues aunque suene como algo insano, así sucedió. El miércoles pasado, durante el partido de los Tiburones Rojos contra Jaguares, El Flamer se acercó misteriosamente al gobernador Fidel Herrera Beltrán, le entregó un oficio que el mandatario leyó con calma. De inmediato pensé que pediría más para becas o para instalaciones deportivas, vamos, algo relacionado con el tema.

El Ejecutivo sólo levantó su mirada y le dijo que no se preocupara por esos detalles. Sonrió a fuerza y signó el documento. ¿Qué decía ese texto? ¿Cuál era la preocupación inmediata de Bueno? Yo sí pensé que era de vida o muerte por la sudoración en su cara. Cuando me enteré del contenido no supe si reír, gritar, llorar o qué hacer.

Y es que el papel era la solicitud para que Francisco Martínez, un empleado en la Villa Deportiva, conocido como “Mi Sangre”, fuera el próximo Rey Feo del carnaval. Y para colmo de males, Joe de Lara se paseó por el palco del gobernador ese mismo día. Dios mío, creo que mi pesadilla se hace realidad.

El Flamer de deporte no sabe nada, sus asesores le soplan lo que debe decir y sólo sale en la foto, pero qué tal para preparar las fiestas carnales del 2008, porque del proceso de Olimpiada estoy seguro que anda por las nubes.

Marcaje Personal
Ahora, vamos con la otra vergüenza, y digo esa palabra porque no encontré otra que sea superlativa para la situación de los Tiburones Rojos, porque eso de perder 8-0 ya es no tener madre.

No ocuparé mucho espacio para decir cosas que serán colocadas en muchos medios de comunicación. Yo me dediqué mejor a ver otro aspecto: ¿Qué pensaría en esos momentos Mohamed?

Por lo que me dediqué a hacer un sondeo con mis amigos y colegas que tenía conectados en el Messenger en esos momentos. La gran mayoría renunciaba de inmediato (me incluyo en esa postura); otros, según palabras literales, mandaban a la chingada a todos los jugadores, principalmente Irenio, Mancilla y Peppino para traer a, lo que llamaron, verdaderos jugadores, pero primero conseguir tres puntos contra Tecos.

Y dejo esto para el final, porque aparte de ser el único que lo respondió, un amigo y ex jefe que ahora trabaja para la FIFA en Europa, se limitó a decir que si fuera El Turco agarraría tremenda borrachera al grado de olvidar quién era y cuál era su empleo, luego ya vería qué hacer. Creo que la afición, después de ese trágico domingo en CU, podría tomar esa opción y dedicarse a disfrutar lo que se ve como el último semestre del Veracruz en Primera División, aunque haya gente en el Gobierno del estado que me haya deseado meses atrás que la boca se me hiciera chicharrón. De verdad que no fueron mis malos deseos, sino que la realidad no la puedo ocultar tal y como es.

Hasta la vista.

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