La gobernabilidad, responsabilidad de todos

Vicente Luna Hernández

Una de las máximas exigencias de toda sociedad moderna, es que existan condiciones de convivencia sana entre todos los sectores que la integran, esto es, que cada ciudadano tenga bien definidos y establecidos legalmente sus derechos y obligaciones, de manera que se eviten disputas estériles y confrontaciones desgastantes, que lo único que logran es lastimar la sana convivencia entre todos.
Por ello, es importante que todo gobierno elegido democráticamente cumpla de manera eficaz sus responsabilidades establecidas en nuestros textos legales, para con ello, contribuir al desarrollo económico, político, cultural y social de sus gobernados, sin importar ideologías ni colores partidistas, ya que el ciudadano lo único que exige, es que se viva en un verdadero Estado de Derecho que le permita desarrollarse en todos los aspectos de su vida..
Cuando hablamos de gobernabilidad no solo debemos de mirar hacia las instituciones gubernamentales, sino también, revisar nuestras actitudes y cumplir nuestras responsabilidades como ciudadanos, esto es, informándonos de nuestros derechos, cumpliendo nuestras tareas y de manera organizada lograr el mejoramiento de nuestras condiciones materiales de convivencia social.
Es una realidad que toda autoridad tiene obligación de atender, escuchar, resolver y conciliar diferencias que muchas de las veces son ignoradas y se van polarizando poco a poco, pero también es cierto, que nadie está obligado a lograr lo imposible, esto es, acuerdos o resultados que en un momento dado, las condiciones políticas, sociales, económicas, etc., no son las idóneas, por ello, es importante la sensibilidad que debe de mostrar todo servidor publico para ser parte de una solución… no un problema.
Es una irresponsabilidad política decir que la responsabilidad total en nuestro estado, es obligación única y exclusiva del gobierno en turno, cada actor social y político debe de contribuir a que esta se consolide cada día más en beneficio de todos, no se vale solo defender intereses particulares afectando el interés de las mayorías, no se vale hacer un escándalo mediático solo para obtener ventajas en negocios propios, ni se vale decir ¡ladrón, ladrón! escondiendo la cartera ajena.
El gobierno es el principal responsable en mantener la gobernabilidad en nuestro Estado, debe ser atento a los reclamos ciudadanos y al cumplimiento de sus responsabilidades en el ejercicio del poder político, de nada sirve ser un gobierno cercano a la gente, si a pesar de esa cercanía mantiene oídos sordos a las distintas voces, de nada sirve conocer los problemas sin saber las soluciones o tener la voluntad de buscarlas, de nada sirve la experiencia acumulada si se aplican los mismos vicios y medidas obsoletas, de nada sirve un gobierno de jóvenes si se tienen actitudes viejas que lastiman la dignidad de las personas.
La ciudadanía veracruzana le apuesta al buen gobierno del Dr. Javier Duarte de Ochoa, le apuesta a reforzar programas de servicios públicos exitosos y a desaparecer aquellos desgastados o que no cumplieron con las expectativas generadas, nadie en su sano juicio debe apostar por los tropiezos de este gobierno, millones de veracruzanos deseamos una gobernabilidad saludable por el bien de todos, y cuando digo todos, me refiero a los más desprotegidos, a la clase media, a la clase media alta y aquellos que forman parte de la elite privilegiada, todos necesitamos de todos.

p.d.- Con el ánimo de que el calor humano supere a esta temporada fría… escribiré otro día.
Correo electrónico: vicentelunahz@hotmail.com