Seguridad Pública: Prepotencia y rudeza innecesaria

Claudia Guerrero Martínez
Entre lo utópico y lo verdadero
Era casi las diez de la noche. Un día como todos, normal y sin problemas. El señor salía de sus actividades cotidianas y se dirigía a su domicilio, el cual omitimos generales, para descansar y cenar con su familia. Aborda un Tsuru de color blanco y circula por calles de un importante municipio de Veracruz. A dos cuadras de su vivienda, lo aborda una patrulla de Seguridad Pública de Veracruz, la cual, omitimos el número de la unidad por posibles replesalias… Era una pick up con cuatro elementos armados con metralletas y rifles, además de estar encapuchados para no ser reconocidos. La reacción del hombre fue de autoprotegerse ante una situación de peligro y decide llegar a su domicilio para hablar con los elementos… Era tan sólo una cuadra más, que debía recorrer en ésta extraña intercepción…
Llegando a su vivienda, los elementos policiacos le cerraron el paso. Molestos, tres de ellos bajaron de la unidad y empezaron a gritar insultos, pateando el automóvil del trabajador. Al ver eso, el afectado dentro del auto tomó su celular y llamó a su esposa para que saliera y viera la escena como testigo, pues tenía miedo que fuese secuestrado por los iracundos policías encapuchados de Seguridad Pública del Estado… Pensó que tendría un testigo de los hechos por si le pasaba algo…
Y pasó un minuto… Un cuarto policía encapuchado, al ver que no bajaba de la unidad el presunto sospechoso, se bajó de la patrulla y más iracundo y violento, patea la salpicadera y puerta del Tsuru para amedrentar al fugitivo de una cuadra. Esto se muestra en el video subido a YouTube con la ligahttps://www.youtube.com/watch?v=csRX3_dlVGk en el cual, refleja los excesos y rudeza de estos elementos policiacos del titular Arturo Bermúdez Zurita.
Al final, el afectado bajó de la unidad y mostró documentos del auto y credencial de elector, demostrando así, ser un ciudadano sin problema alguno. Al ver los policías que habían realizado un excesivo operativo, decidieron darle las gracias al temeroso hombre y abordar la unidad, para dirigirse con rumbo desconocido, dejando asustados al afectado y su esposa, sin olvidar los daños a la unidad gracias a las patadas realizadas por policías irrascibles…
El video dura tres minutos 47 segundos y fue entregado a la que aquí escribe para ser publicado en You Tube y ventilar este problema que se ha convertido en una actitud de prepotencia desmedida por parte de los elementos de la Policía de Seguridad Pública Estatal. Lo lamentable, es que ésta constante se muestra desde su titular Arturo Bermúdez Zurita, quien hemos criticado hasta el cansancio los excesos y abuso en su comboy lleno de guaruras para trasladar al funcionario por las calles de Xalapa para resguardar su integridad física… Y cuando está más temeroso , utiliza el helicóptero oficial aterrizando en el edificio que alberga Seguridad Pública del Estado
Y peor, cuando pones como ejemplo el Fraccionamiento en donde vive… Un lugar donde se instaló una caseta de policía y nadie entra ni sale, sin ser revisada su credencial de elector y a quién visita. Luego, cuentas una, dos, tres, diez, trece patrullas a lo largo de todas las calles de este fraccionamiento para cuidar los accesos con excesos de unidades policiacas. Después ya en su domicilio, otro tanto más de patrullas y junto de la residencia, un terreno baldío habilitado para estacionar más patrullas sin elementos. Ahí contamos siete patrullas relativamente nuevas y algunas hasta con polvo mostrando no haber sido utilizadas por algún tiempo…
Estos excesos, nos indigna y molesta. Y nadie tiene más culpa, que quien permite esto, como es el propio empleado de los veracruzanos Javier Duarte de Ochoa, quien tal parece tiene un compromiso moral y económico con Arturo Bermúdez Zurita para permitir que el titular de Seguridad Pública haga y deshaga con recursos, personal y unidades para moverlas a su antojo y prepotencia desmedida.
Y mucho peor, el edificio que albergaba oficinas del Instituto de Pensiones (IPE) y hoy es rentado para SSP, contando aún más, con el estacionamiento que generaba buenos recursos para el raquítico y saqueado IPE… Hoy, Seguridad Pública del Estado lo utiliza para guardar patrullas, autos de los empleados y todas las camionetas propiedad de Arturo “El Inseguro” Bermúdez Zurita, quien es conocido por los comensales de conocido café de la calle Zaragoza, por cerrar la calle y esperar los automóviles hasta cinco minutos para ver salir del referido estacionamiento el convoy del lujo de Seguridad Pública…
Hasta hoy, Arturito “El Inseguro” no ha justificado el por qué los elementos policiacos están encapuchados… Se entiende en operativos contra el narcotráfico, pero en delitos del fuero común es ilegal cubrirse el rostro y mucho peor, instalar a encapuchados en módulos de atención para turistas, a lo largo de las principales autopistas de Veracruz… Enmascarados y todos se presentan como “El Comandante Pérez”, es seguro que ningún turista quisiera pedir informes e intimida a los visitantes, dando una imagen de que en Veracruz estamos en guerra…
Ya hemos descrito en otras entregas, los desvíos de recursos del titular de Seguridad Pública y los excesos en la vigilancia de él y su familia, sin contar ser un acaudalado empresario, dueño de hoteles en Chachalacas, del municipio de Úrsulo Galván, escuelas de diseño e inglés, entre otras, casas en Estados Unidos y hasta varias residencias en Xalapa para “despistar el enemigo”… Si el propio Bermúdez Zurita ha confirmado que Veracruz es seguro, entonces a cuál enemigo quisiera despistar o sufre instinto de persecución en su “cabecita enferma”…
Por lo pronto, ya hemos pedido la renuncia del Arturo Bermúdez Zurita. Terminar este cacicazgo policiaco y entendamos que si el jefe es prepotente, también lo serán los elementos policiacos… Si ven rudeza en el jefe, los policías entienden ese lenguaje y lo aplican… Si ven al jefe moverse de manera impune, los policías entienden que el uniforme les da el pasaporte de impunidad operativa… Y si ven que al jefe nadie lo toca, los policías comprenden, dentro de su lógica, que ellos tienen la ley en su mano y la aplican como ellos quieren, afectando a la ciudadanía…
El elocuente video, muestra cómo antes, los policías de antaño eran respetados y la ciudadanía valoraba su empeño y servicio a la ciudadanía. Tenían confianza en ellos… Hoy, son repudiados y los habitantes temerosos desconfían de una Policía encapuchada y prepotente, que ninguna instancia les pone freno, mucho menos la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Veracruz, instancia convertida en un elefante blanco, sin credibilidad y sin aplicar correctamente las sanciones a policías abusivos y prepotentes, permitiendo su actuar impunemente… Sentimos decirlo, la ciudadanía debe cuidarse de todos los peligros, ya sean delincuentes, narcotraficantes y ladrones… Hoy, hasta de nuestra propia policía en Veracruz… Es lamentable esto…

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